jueves, marzo 08, 2012

EL CEREBRO MASCULINO (10)

LOS SOLTEROS EMPEDERNIDOS

Frank, el amigo de Ryan, era un soltero empedernido y un maestro de la seducción.

Él tenía frases bien ensayadas y sabía exactamente qué decir y hacer para obtener placer sexual.

Frases como “Eres tan bella que deberías ser modelo” o “Nunca he conocido una mujer como tú”, pueden ser clichés, pero Frank era tan guapo y encantador que las mujeres caían en las garras de su seducción.

Y según las investigaciones, 3 de 4 hombres dijeron que estaban dispuestos a mentir o “distorsionar la verdad” para persuadir a las mujeres para que tengan sexo con ellos.

Se ha descubierto que las cosas acerca de las cuales los hombres mienten son similares en todo el mundo.

Los hombres exageran su riqueza, su status así como sus conexiones comerciales y sociales.

Ahora que Nicole y Ryan se veían varias veces a la semana, ella escuchaba a Frank alardear acerca de sus conquistas más recientes.

Ella estaba tan desalentada por el accionar de Frank que intentaba alertar a Stacy, la nueva pareja de Frank.

Pero de nada servía.

El cerebro y el organismo de Stacey ya habían caído bajo el hechizo seductor de Frank.

Las mujeres suelen ser más "auditivas", es decir que las palabras que escuchan tienen una enorme significatividad ("te necesito", "eres bella", "eres especial", "te amo", "siempre te amaré", "no sé que haría sin ti", etc.).

Algunos autores señalan que leer mensajes de texto y palabras en un chat tienen similar efecto como si dichas palabras y frases fuesen verbalizadas y escuchadas.

Lo que Stacey no sabía era que cada vez que ella y Frank tenían relaciones sexuales, ella se enamoraba un poco más (la oxitocina que ella liberaba durante sus orgasmos unía su cuerpo y cerebro cada vez más a Frank).

Sin embargo, funcionaba al revés para él.

Frank empezaba a aburrirse.

Cuanto más Stacey intentaba presionarlo a hacer futuros planes, él más se escabullía.

Frank sentía que ya era tiempo de pasar la página.

Frank no deseaba una jaula de domesticación para él.

NOTA: Como se señala al inicio de este artículo, este puede ser el caso de muchos solteros “empedernidos” pero no es el caso de todos por igual. No todos los hombres son iguales. Existe la diferenciación individual de cada ser humano.

[continuará...]

Resumen de las investigaciones de Louann Brizendine, M.D.

http://www.psicologosperu.com/

miércoles, marzo 07, 2012

EL CEREBRO MASCULINO (9)

Los chicos no pueden entender por qué a las chicas les gusta hablar tanto o por qué necesitan compartir cada detalle específico.

Los chicos hablan acerca de juegos y objetos, las chicas hablan acerca de personas y relaciones.

Y estas diferencias, también, pueden ser fomentadas por las hormonas.

HABITOS DE APAREAMIENTO

Los investigadores han hallado que cuando un hombre se siente atraído sexualmente hacia una mujer, querrá tener sexo con ella lo antes posible.

En el caso de los hombres que formaron parte del estudio, esperar una semana o más les parecía mucho tiempo.

Las mujeres, por otro lado, deseaban esperar hasta 3 veces más tiempo.

En la forma más básica, para un hombre, ganar el juego del apareamiento significa que su ADN y sus genes trascenderán hacia la próxima generación.

Aunque el hombre no está pensando esto conscientemente, la parte de los instintos en su cerebro sabe que con cuantas más mujeres tenga sexo, más probabilidades tendrá de tener descendencia.

Mientras tanto, el cerebro femenino intenta discernir si el hombre tiene lo que se requiere para ser un buen protector y proveedor.

Los investigadores han hallado que esto es cierto independientemente del nivel de instrucción de la mujer o de su independencia económica.

Como los hombres bien lo saben, ellos tienen que desarrollar y refinar una serie de maniobras tácticas de galantería, ya que las mujeres tienen distintos objetivos en cuanto a apareamiento en comparación con los hombres.

El cerebro femenino desea la esperanza de amor y compromiso antes de tener relaciones sexuales, pero para los hombres, el sexo frecuentemente es primero.

Los investigadores han demostrado que no existe mejor afrodisiaco para las mujeres que el hecho de que su hombre demuestre dominio y fortaleza.

Aunque los humanos y los animales presentan diferencias en sus estrategias de apareamiento, los científicos han podido observar algunas curiosas similitudes.

Uno de los ejemplos más coloridos de las tácticas animales lo observamos en la lagartija de manchas laterales.

Convenientemente, los machos presentan 3 distintos colores de cuello que coinciden con sus estilos de apareamiento.

Los machos de cuello naranja utilizan la estrategia de harem del macho alfa: Protege a un grupo de hembras y se aparea con todas ellas.

Los machos de garganta amarilla se escabullen en el harem de la lagartija de cuello naranja y se aparea con las hembras en cualquier oportunidad que puede.

Los machos de garganta azul utilizan la estrategia de exclusividad, es decir, se aparean con una sola hembra y la protegen las 24 horas del día.

Desde una perspectiva biológica, tanto las propuestas del líder del harem de cuello naranja, como del escabullidizo garganta amarilla, y del garganta azul de una sola hembra, son estrategias de apareamiento exitosas para las lagartijas y también para los humanos.

La mayoría de mujeres desearía que su pareja fuese como el de garganta azul.

LA HORMOMA DE LA MONOGAMIA = genes receptores de vasopresina en el cerebro.


[continuará...]

Resumen de las investigaciones de Louann Brizendine, M.D.

http://www.psicologosperu.com/

lunes, marzo 05, 2012

EL CEREBRO MASCULINO (8)

VIENDO EL MUNDO A TRAVES DE LOS OJOS MASCULINOS

Si una mujer pudiese ver el mundo a través de “lentes masculinos”, quedaría atónita de cuán diferente sería su perspectiva.

Cuando un niño ingresa a la pubertad y su cuerpo y voz cambian, sus expresiones faciales también cambian, y también cambia la forma cómo él percibe las expresiones faciales de las demás personas.

Pueden echarle la culpa a las hormonas.

Un propósito clave de una hormona consiste en producir nuevos comportamientos modificando las percepciones de nuestro cerebro.

La testosterona y la vasopresina alteran el sentido de la realidad en un adolescente varón.

En forma similar, el estrógeno y la oxitocina modifican la forma como las adolescentes perciben la realidad.

Los cambios hormonales de las chicas preparan sus cerebros para establecer conexiones emocionales y relaciones, mientras que los cambios hormonales de los chicos los preparan para conductas enérgicas y territoriales.

A medida que vayan alcanzando la masculinidad, estas conductas les ayudarán a defenderse y proteger enérgicamente a sus seres queridos.

Pero primero, necesitarán aprender cómo controlar dichos impulsos innatos.

La vasopresina dirige hormonalmente a su cerebro para que vea los rostros neutrales de las personas como poco amigables.

Investigadores en Maine sometieron a prueba las percepciones de los adolescentes con respecto a rostros neutrales aplicándoles un spray nasal de vasopresina.

Hallaron que, bajo la influencia de esta hormona, las adolescentes clasificaban los rostros neutrales como más amigables, pero los adolescentes varones clasificaban los rostros neutrales como menos amigables e incluso hostiles.

Esto puede explicar por qué el rostro de un adolescente varón puede parecer enojado cuando en realidad está aburrido.

Los biólogos evolucionistas consideran que el hecho de percibir los rostros como más enojados de lo que realmente están, tiene un fin adaptativo para los varones.

Les permite evaluar rápidamente si deben pelear o huir.

Al mismo tiempo aprenden a ocultar sus emociones.

Algunos científicos plantean que los humanos masculinos han conservado el vello facial y las barbas, incluso en climas más cálidos, con el fin de parecer más fieros y ocultar sus verdaderas emociones.

En la jerarquía masculina de los primates y de los seres humanos, el rostro enojado se emplea para conservar el poder.


Y los rostros más enojados generalmente pertenecen a los hombres con mayores niveles de testosterona, según las investigaciones.

Un estudio de varones adolescentes en Suecia reveló que aquellos que tenían más testosterona reaccionaban más agresivamente a las amenazas.

Dichos adolescentes con mayores niveles de testosterona también reportaban ser más irritables e impacientes.

Y en otro estudio, los niveles de testosterona aumentaban en respuesta a ver un rostro enojado, activando así los circuitos cerebrales de agresión.

Por lo tanto, los rostros enojados (sean reales o imaginarios) encienden el ánimo masculino por pelear.

Los adolescentes que posean un menor nivel de testosterona y vasopresina, no se sentirán tan animados a pelear ni se sentirán obligados a competir y ganar.

Dicha mezcla de hormonas los puede volver irritables y, en algunos casos, irracionales.

[continuará...]

Resumen de las investigaciones de Louann Brizendine, M.D.

http://www.psicologosperu.com/

domingo, marzo 04, 2012

EL CEREBRO MASCULINO (7)

ABURRIDO Y CON SUEÑO

El reloj biológico del sueño en un cerebro masculino empieza a cambiar cuando tiene 11 o 12 años de edad.

Los receptores de testosterona reconfiguran sus células cerebrales de temporalidad de forma que el adolescente se queda hasta muy tarde en la noche y duerme hasta más tarde en la mañana.

Para cuando un adolescente varón cumple 14 años, su nuevo patrón de sueño se desplaza una hora más en comparación con el de las chicas de su edad.

Este cambio cronológico es solo el inicio de la falta de sincronización con el sexo opuesto.

De ahora en adelante, hasta que sus compañeras pasen por la menopausia, los chicos dormirán y se despertarán más tarde de lo acostumbrado.

En la actualidad, la mayoría de adolescentes varones reportan dormir solo de 5 a 6 horas durante los días de escuela, aun cuando sus cerebros requieren por lo menos 10 horas de descanso.

Algunos padres tienen que desconectar el internet si quieren que sus hijos duerman.

Si los sistemas educativos y los docentes realmente quisieran que los adolescentes realmente aprendan, retrasarían las horas de inicio en varias horas.

Al menos ello incrementaría las probabilidades de que pudieran permanecer con los ojos abiertos, aun cuando no se pueda eliminar su rostro de aburrimiento.

Los científicos han descubierto que el centro de placer en el cerebro adolescente masculino está casi adormecido en comparación con la misma zona cuando son niños y adultos.

El centro de recompensa del cerebro masculino adolescente se activa con menor facilidad y no es suficientemente sensible para sentir niveles normales de estimulación.

No actúan aburridos sino que están aburridos y no lo pueden evitar.

Cuando Erin McClure y sus colegas del National Institute of Mental Health escanearon cerebros de adolescentes mientras éstos observaban imágenes impactantes de cuerpos mutilados y grotescos, notaron que dichos cerebros adolescentes no se activaban tanto como sucedía con los cerebros de niños y de adultos.

Como lo saben muchos profesores de educación secundaria, el cerebro masculino adolescente necesita ser intensamente impactado o asustado para que se active siquiera un poquito.

La cantidad de estimulación que se requiere para impactar a un adulto, apenas hará que reaccione un adolescente varón.

Si deseamos que ellos reaccionen lo suficiente para gritar o saltar, tendremos que intensificar tal vivencia con sonidos, luces, acción y sangre.

Por eso es que a los adolescentes varones les gustan los efectos especiales de sangre y las películas de acción.

Esta preferencia quizás no varíe al llegar a la adultez (como bien lo saben los directores de películas), pero los hombres adultos no necesitarán sentir la misma intensidad que cuando eran adolescentes y estaban en busca de emociones.

Gran parte de las reacciones de ira del adolescente masculino está siendo activada por la nueva forma en que su cerebro masculino está vivenciando el mundo y las personas que lo habitan.

[continuará...]

Resumen de las investigaciones de Louann Brizendine, M.D.

http://www.psicologosperu.com/

sábado, marzo 03, 2012

EL CEREBRO MASCULINO (6)

LA GUERRA DE LAS TAREAS

Los adolescentes varones no están tratando de hacerse los difíciles.

Es solo que sus cerebros aún no están configurados para dedicarle mucho tiempo a pensar en el futuro a largo plazo.

Hacer que los chicos estudien y hagan su tarea ha sido siempre una batalla para los padres más que con las chicas, y con las tentaciones tecnológicas del mundo de hoy, esta batalla puede percibirse como una guerra.

Estudiar en vez de hacer algo divertido por internet simplemente no tiene sentido para los chicos adolescentes.

Las investigaciones demuestran que se requiere sensaciones extraordinariamente intensas para activar los centros de recompensa del cerebro adolescente varonil, y realizar tareas no es una de ellas.

Un recurso para los padres consiste en disciplinarlos avisándoles anticipadamente que podrían pasar un tiempo PRUDENTE sin los videojuegos, sin su teléfono celular o sin televisión VERSUS un par de entradas a su partido o concierto favorito o cualquier otra cosa que le agrade al adolescente si es que mantiene un buen promedio y entrega todas sus tareas.

Se sorprenderán cuando vean que las notas de su hijo mejorarán inmediatamente.

Nos corresponde hallar la forma de que los adolescentes se lo tomen en serio (algunas técnicas son: lluvia de ideas, ensayo/error, acuerdos parentales, refuerzos positivos cuando realizan las conductas deseadas, consultoría psicológica, etc.).

Muchas de las normas en nuestro sistema escolar entran en conflicto directo con los cerebros aventureros de los varones adolescentes en busca de libertad.

Entonces no debería sorprendernos el hecho de que los adolescentes varones provoquen el 90% de los disturbios en el salón de clase ni que 80% de las deserciones en secundaria se trate de varones.

Los adolescentes varones suelen obtener el 70% de las calificaciones D y F.

Y no ayuda el hecho de que las horas de inicio de clases estén totalmente fuera de sincronización con el ciclo de sueño del cerebro adolescente.

Son suficientemente inteligentes para obtener excelentes notas es simplemente que no les interesa.

Nota del psicólogo Luis Venegas: Aquí estamos hablando de generalidades. Evitemos sobre-generalizar. Siempre habrá excepciones a la regla. Y recuerden que hay que tener en cuenta las características individuales de cada uno.

[continuará...]

Resumen de las investigaciones de Louann Brizendine, M.D.

http://www.psicologosperu.com/

viernes, marzo 02, 2012

EL CEREBRO MASCULINO (5)

EL CEREBRO ADOLESCENTE

Un tsunami de testosterona

Entre las edades de 9 y 15 años, el circuito cerebral masculino, con sus miles de millones de neuronas y trillones de conexiones, empieza a activarse a medida que su nivel de testosterona se eleva veinte veces más.

De allí en adelante, la testosterona masculiniza biológicamente todos los pensamientos y comportamientos que emerjan del cerebro.

Estimula el rápido crecimiento de los circuitos cerebrales masculinos que se estuvieron formando antes de nacer.

Asimismo hace que sus testículos crezcan, activa el crecimiento de sus músculos y huesos, hace que crezca barba y vello púbico, hace que su voz se torne más profunda y que su pene se alargue y engruese.

Igualmente hace que los circuitos cerebrales sexuales, en su hipotálamo, crezcan más del doble en comparación con el cerebro de las niñas.

El cerebro masculino ahora está estructurado para priorizar en su mente la búsqueda de satisfacción sexual.

A inicios de la pubertad, cuando las imágenes de senos y otras partes corporales femeninas inundan la corteza visual cerebral, algunos muchachos se preguntan si no se estarán convirtiendo en “pervertidos”.

Les tomará algún tiempo acostumbrarse a su renovado interés por las chicas, el cual funciona en piloto automático.

El sexo no es la única cosa que pasa por la mente de un adolescente varón.

A medida que la testosterona va inundando las células cerebrales del adolescente, va estimulando a una hormona denominada vasopresina.

Juntas, la testosterona y la vasopresina, hacen que el cerebro se torne territorial acerca de su cuarto y sensible a las críticas de sus compañeros, ya sean supuestas o reales.

Y cuando estas hormonas se mezclan con la hormona del estrés, denominada cortisol, sobrecargan su cuerpo y mente, preparándolo para la respuesta de pelear o huir con respecto a los desafíos en su mundo.

Nuestros cerebros se han venido conformando a través de cientos de miles de años de vivir en grupos jerárquicos.

Y aunque no todos los adolescentes varones desean ser “los reyes de la colina”, sí desean estar más cerca de la cima del poder y alejarse de los últimos lugares en lo posible.

Y ello puede significar asumir riesgos que pueden meterlo en problemas.

Mensaje para los padres de hijos adolescentes varones:

“No se preocupen. Se requiere unos 8 a 9 años para que el cerebro adolescente complete el remodelado que se inició al ingresar a la pubertad. Sus circuitos cerebrales reforzados hormonalmente se estabilizarán al final de su adolescencia o luego de cumplir veinte años”.

“Su hijo es como cualquier otro chico adolescente que ha pasado por el Planeta Tierra. Va a ver videos pornográficos, va a rehuir de las tareas, va a involucrarse en peleas y se le va a caer la baba por las chicas. Una vez que pase esta etapa, volverá a entrar en razón”.

[continuará...]

Resumen de las investigaciones de Louann Brizendine, M.D.

http://www.psicologosperu.com/

jueves, marzo 01, 2012

EL CEREBRO MASCULINO (4)

La ley del más fuerte importa más a los niños varones.

Los estudios han demostrado que a la edad de 2 años, el cerebro del niño varón lo impulsa a establecer dominancia física y social.

Entre las niñas también se establece cierta jerarquía de dominancia pero esta es más fluida y puede variar.

En los niños varones, al final de la segunda sesión de juegos, los niños varones unánimemente acuerdan acerca de la posición de cada niño en el ranking, y esa posición suele permanecer estable por algún tiempo.

¿Cómo saben los niños tan rápidamente quién es fuerte y quién no?

Mientras que los niños más grandes generalmente ocupan un lugar más alto en el estatus, los investigadores han descubierto que los líderes no siempre son los más grandes.

En un estudio, los niños alfa eran los que rehusaban dar marcha atrás en un conflicto.

Estos niños agresivamente demostraban su fortaleza molestando, intimidando o pegando a los niños que los retaban.

En las pruebas de hormonas que se tomó a todos los niños varones del grupo, resultó que los niños alfa tenían mayores niveles de testosterona que los demás niños.

Y para sorpresa de los investigadores, el rango que un niño había alcanzado en el grupo a la edad de 6 años, predecía dónde estaría en la jerarquía a la edad de 15 años.

Obviamente, solo un niño puede ser el “jefe máximo”, así que el resto debe hallar otras formas de triunfar y evitar ser molestado en el grupo de niños.

Una estrategia consiste en formar una alianza con el niño alfa dándole cosas que él desea y haciéndole favores.

A pesar de cómo las madres se sientan por ello, no obstante, los niños instintivamente saben que deben aprender a triunfar dentro de la jerarquía masculina.

[continuará...]

Resumen de las investigaciones de Louann Brizendine, M.D.

http://www.psicologosperu.com/